El nuevo dispositivo MicroLab permite detectar la presencia de Salmonella o Listeria en muestras de alimentos de una manera sencilla y 100% segura. El nuevo sistema integra en un único dispositivo desechable, todas las fases del análisis para facilitar y agilizar los resultados de forma interna y minimizar las pérdidas ante una contaminación.

La Listeria y la Salmonella son dos de las principales preocupaciones del sector alimentario en materia de seguridad. Durante el periodo 2014 a 2017 se notificaron 1.139 brotes de salmonelosis alimentaria en España y más de 1800 casos de contagio en la UE por listeria.

Para poder gestionar y mejorar el autocontrol la empresa Zeulab lanza al mercado “un dispositivo de análisis, todo en uno, que permitirá a las empresas del sector agroalimentario hacer autocontrol de su producción de forma autónoma y sin riesgos de contaminación de una manera sencilla y fiable” apunta el CEO de Zeulab Dr. Pedro Razquin. MicroLab cuenta con dos líneas de producto, una para la detección de Salmonella y otra para Listeria monocytogenes.

Microlab integra las 3 fases del análisis en un solo dispositivo (enriquecimiento, detección e inactivación). El proceso se realiza de la siguiente manera: tras introducir la muestra, el dispositivo se cierra de forma hermética evitando cualquier riesgo de contaminación en presencia de muestras positivas. Trascurrida la etapa de enriquecimiento, de 24 horas para Salmonella o 48 horas para Listeria, se obtiene el resultado en 15 minutos, de manera visual y fácilmente interpretable. Una vez finalizado el ensayo, el dispositivo se puede inactivar para que pueda ser desechado de manera segura.

Las ventajas de este nuevo dispositivo son, entre otras, la posibilidad de reducir/eliminar el riesgo y realizar un primer control tanto para aquellos productos de que por tener una vida corta necesitan de la rapidez de los resultados como para las empresas que no dispongan de laboratorio propio y necesiten de resultados rápidos que les permitan iniciar los procesos de transformación del producto.  Además, permite su aplicación en una amplia variedad de matrices cárnicas, lácteas, ahumados y ovoproductos. La seguridad y el riesgo de contaminación son elementos claves en la reputación de las marcas del sector.

Gracias a su sencillez y seguridad las empresas alimentarias van a contar con un nuevo sistema de seguridad en sus procesos de trabajo, permitiéndoles hacer análisis de autocontrol sin necesidad de contar con un laboratorio interno, un paso más en la seguridad alimentaria.